Según los CDC, cada año entre 80.000 y 90.000 personas sufren problemas asociados a lesiones cerebrales traumáticas. La causa más frecuente de este tipo de lesiones son las caídas y los accidentes de tráfico, que frecuentemente resultan en algún tipo de golpe brusco en la cabeza. Un abogado con experiencia en lesiones cerebrales traumáticas puede ayudarte a obtener la indemnización que tu situación merece, pero también es útil tener cierta familiaridad con el tema.
Durante un accidente de coche, un conductor puede golpearse la cabeza por numerosas causas, lo que a su vez puede causar daños en el cráneo o el cerebro. Tras sufrir un accidente, es común que los conductores o pasajeros experimenten síntomas de un problema neurológico. Si se dejan sin tratar, estos pueden convertirse en condiciones permanentes. Existen diferentes tipos de problemas neurológicos, entre los que se incluyen:
- Ataxia: pérdida gradual del control muscular debido al deterioro gradual de los nervios. Un síntoma común de la ataxia es la falta de equilibrio.
- Pinzamiento nervioso: un pinzamiento nervioso suele notarse uno o dos días después de un accidente de coche y puede incluir síntomas como incapacidad para controlar la vejiga y dolores constantes en el pecho.
- Radiculopatía: producida cuando un nervio se comprime entre la columna vertebral. Un síntoma común de la radiculopatía incluye una sensación de hormigueo en la columna vertebral y la zona lumbar.
- Conmoción cerebral: una conmoción cerebral se produce cuando el cerebro experimenta un traumatismo, y entre los indicios comunes de una conmoción cerebral se incluyen los mareos y la dificultad gradual para mantener la concentración.
En conjunto con las lesiones físicas y neurológicas, muchos conductores también experimentan problemas emocionales, como miedo o ira, después de un accidente. Los problemas neurológicos no siempre son evidentes inmediatamente después de un accidente, siendo posible que un paciente puede experimentar problemas semanas o incluso meses luego de que el incidente haya ocurrido. Los indicios más comunes de un problema neurológico a largo plazo incluyen dolores de cabeza u hormigueo en las articulaciones.
Antes de buscar asesoría legal, es recomendable buscar asistencia médica y un diagnóstico profesional. Si la causa es un problema neurológico, puedes tener derecho a una indemnización por tus lesiones. Los gastos médicos incluyen exámenes, medicamentos recetados y cualquier tratamiento o terapia de rehabilitación.