Luego de sufrir un accidente automovilístico, es natural querer hacer todo lo que esté a tu alcance para procesar tu reclamo de la forma más rápida y simple posible. Sin embargo, proporcionar una declaración grabada a la aseguradora del demandado con la esperanza de acelerar el proceso de tu reclamo, pudiendo incluso costarte el total de la compensación que podrías obtener por tu caso.
En general, el objetivo de una compañía aseguradora que enfrenta un reclamo de lesiones personales es pagar lo menos posible al demandante, no lo que sea necesariamente justo. Con el fin de garantizar esta meta, las aseguradoras intentarán una variedad de trucos deshonestos, incluyendo usar tus propias palabras en tu contra.
Si bien una declaración grabada no se da bajo juramento, el contenido de esta puede utilizarse como prueba en tu contra al momento de presentar un reclamo de lesiones personales. Algunas de las razones por las que se aconseja no dar una declaración grabada a una aseguradora incluyen:
- El entrevistador puede hacer preguntas engañosas diseñadas para que proporciones información incriminatoria.
- El entrevistador podría incitarte a especular sobre la causa del incidente, haciendo que tu testimonio sea menos creíble o dando espacio para argumentar que eres culpable de tus lesiones.
- El entrevistador podría usar tu declaración para crear dudas sobre la gravedad de tus lesiones, o para implicar que estas fueron causadas por motivos externos al accidente por el que has iniciado tu reclamo.
- Tus nervios y emociones pueden ser usadas en tu contra y presentar tu versión de los hechos como deshonesta o poco verídica.
- Si tu primer idioma no es el inglés, tus respuestas podrían ser intencionalmente malinterpretadas por el entrevistador.
Si bien una aseguradora tiene derecho a solicitar declaraciones de tu parte, antes de proporcionar cualquier tipo de declaración, es importante que recuerdes que no existe ningún tipo de obligación legal de declarar ange la aseguradora de la parte demandada. Una manera que muchos recomiendan para manejar esta parte del proceso es contratar un abogado de lesiones personales y encargar a este para manejar todas las comunicaciones que involucren a compañías aseguradoras.